Este año el post de felicitación va con retraso pero no podía dejar pasar más días para que quede constancia que mi pequeño ya ha cumplido los 4 años. Ya poco más puedo añadir de lo especial que es este día para mí, de cómo nació él, de lo mucho que recuerdo ese día, lo largo que fue y cómo acabó siendo tan maravilloso. La verdad es que recordar cuando lo cogí por primera vez y ver sus manitas, con esos dedos tan largos, se me pone la piel de gallina… hace tanto y tan poco a la vez de ese momento. Es un recuerdo que deseo que no se borre nunca de mi cabeza.
El 3 de junio fue SU día. Un día, una vez más, especial para todos. Pero este año él era mucho más consciente de que era su día especial. Llevaba semanas preguntando cuánto quedaba para su cumpleaños, íbamos contando los días y al fin llegó. En el colegio él fue el protagonista siendo el encargado de la rutina del «bon dia», le hicieron una corona con 4 mussols y le cantaron el Happy birthday. Además dos niñas de su clase le hicieron un par de dibujitos, así que salió muy contento. En casa también festejamos en petit comité, ya que la fiesta de cumpleaños sería el fin de semana. Su cara de felicidad al ver que le preparamos este pastelito que véis en la foto con la vela era super bonita. Cada año te das cuenta de que lo viven todo intensamente y cada año se van dando más cuenta de lo que significa una fecha en concreto. Y cuando un año te parece que lo vive intensamente y feliz el año siguiente es aún más. Verle crecer es simplemente genial. No hay mejor regalo en el mundo.
Este año quisimos hacer dos fiestas: una con los del cole en un Aventura Park, ya que fuimos a una de un amiguito suyo hace unos meses y quedó tan alucinado y se lo pasó tan bien que no paraba de pedir la «fiesta pirata» también para él; y la otra fiesta fue en familia en una sala de esas que reservas con piscina de bolas, juegos y demás… Las dos fiestas fueron perfectas. Acabó hecho polvo del fin de semana (y en añadido los tres demás miembros de la familia también). Pero valió la pena.
¡Muchas felicidades, capitán pirata!